miércoles, 6 de enero de 2010

Profundas conversaciones sobre Rock

Vice Magazine vs Lemmy

Vamos, como despertar una mañana tras una borrachera de muerte con una tía al lado a la que le ves la cara y dices, “oh, mierda”.
[risas] Joder, lo que hay que hacer en esos casos es esconderse en el lavabo hasta que se largue.

Yo me hago el dormido.
Es lo que llamo el síndrome del zorro atrapado por un cepo. Te arrancarías un brazo a mordiscos antes que despertarla.

Todos hemos vivido situaciones así.
Me acuerdo de un chico de nuestro equipo, Paulie. Estábamos de gira por Alemania y había dos tías que venían con nosotros a todos los conciertos. Las llamábamos “las Monsters of Rock”. Una de ellas sólo tenía un diente. Eran espantosas pero dejábamos que vinieran porque eran muy fans. Una noche Paulie se llevó a una a la cama. Compartía habitación con nuestro técnico de sonido, Dave Chamberlain. Por la mañana, al despertar, se dio cuenta de que tenía a alguien al lado, pero ni idea de a quién. Se giró para mirar a Dave, y Dave estaba en la otra cama con esta cara [Lemmy hace muecas de asco tremendo]. Paulie puso cara de [otra mueca] y Dave hizo así [asiente con la cabeza]. Paulie corrió a encerrarse en el baño y allí se quedó hasta que la tía se hubo marchado.

Esa es una historia con la que mucha gente puede identificarse.
La mayoría de fans ha vivido cosas por el estilo.


Joder, a mí me ha pasado a lo largo de todo el Lower East Side. Al principio parece buena idea.
Sí, sobre todo a última hora de la noche, borracho.

Es el momento en el que empiezan a asomar las tías buenas.
El momento en el que te parece que todo cristo tiene buena pinta. O te parece manejable. Pero a veces vas tan mal que no te das cuenta de que estás charlando con una cacatúa. O te das cuenta pero no puedes evitarlo. Es como una experiencia extracorporal. Te ves a ti mismo hablando con el dragón y sabes lo que estás haciendo, pero no puedes hacer nada.

Ya, la típica imagen de un ángel y un demonio en cada hombro, dándote consejos.
Y el ángel siempre pierde.

El ángel no tolera bien el alcohol.
Y el demonio tiene forma de polla.

Apuntando hacia ella.
“Hazlo, hazlo”. Y así todo el rato hasta que te lía.

más aquí

No hay comentarios: