lunes, 26 de julio de 2010

Aristóteles-Einstein-Cortocircuito


La filosofía, contenedor del saber universal, fue vaciada de contenido en el momento en que surgieron las diferentes ciencias positivas, convirtiéndose en una mera (aunque indispensable) teoría del conocimiento.

El antiguo filósofo, conocedor de un compendio universal de materias, fue desplazado por los nuevos científicos. Era el momento de la especialización, pues era imposible que un individuo estuviera al tanto de todo el conocimiento y avances en cada una de las diferentes ciencias. Así cada ciencia positiva se establecería con su propia comunidad cerrada de científicos.

Con el evance del conocimiento y la experiencia se fue asentando la idea de que estas ciencias no eran compartimentos estanco, que la interrelación entre ellas era fundamental y que para resolver un problema de una de ellas era necesario recurrir a principios de otra ciencia. De este modo se crearon los grupos interdisciplinares de científicos.

Las máquinas fueron haciéndose indispensables a la hora de almacenar, filtrar e incluso interpretar datos, pero siempre existió una barrera entre esta función y la genuina capacidad humana de crear hipótesis y aportar creatividad. Pero... ¿Estamos a las puertas de una nueva era en que las máquinas van a desplazar a los científicos en sus funciones? ¿Se van a convertir en el científico total? (infalible, omnisciente e infinito)

http://www.elpais.com/articulo/sociedad/Maquinas/capaces/sonar/elpepusoc/20100726elpepisoc_1/Tes